Hergé y Jacobs se conocieron en 1941, antes de comenzar a trabajar juntos en 1944, dando lugar a una colaboración que marcaría profundamente la historia del cómic.
Desde la fluidez narrativa de Hergé hasta la teatralidad hipnótica de Jacobs, cada uno enriqueció el estilo de línea clara a su manera, un estilo que continúa iluminando el cómic.
Si bien sus mundos diferían —Jacobs se inspiraba en la novela popular, el expresionismo alemán y el claroscuro dramático, Hergé en el humor estadounidense y el humor británico—, sus obras se enriqueceron mutuamente.
Este libro relata cómo, a pesar de una rivalidad surgida del éxito, su amistad se mantuvo intacta. A través de un análisis sutil y profusamente ilustrado, el lector descubre cómo la colaboración de estos dos creadores moldeó y enriqueció la estética de línea clara, que se convirtió en el estilo emblemático del cómic moderno.
Éric Verhoest, reconocido especialista en cómic franco-belga, ha escrito un texto fascinante que arroja luz sobre el doble retrato de estos dos grandes artistas. El libro está repleto de documentos raros e inéditos (ilustraciones, páginas, tiras y fotografías) que dan testimonio de sus intercambios creativos y ofrecen una perspectiva innovadora sobre la influencia mutua que moldeó sus respectivos mundos.